SUTEP REGIONAL AREQUIPA

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domingo, 3 de mayo de 2009

FRENTE A LA CAMPAÑA MILLONARIA


¿Qué pretende el gobierno con esta nueva evaluación?

A diferencia de las evaluaciones censales que fueron inventadas antes de aprobarse la ley, y sirvieron como instrumento de desprestigio al magisterio y a la escuela pública, esta nueva evaluación pretende traspasar a los profesores nombrados de la Ley del Profesorado 24029 y su modificatoria 25212 a la nefasta Ley de CPM 29062. Para eso ha diseñado un Programa de Incorporación gradual, a través de la R.M. 121-2008-ED, que fija un cronograma hasta el 20 17 y planeaba incorporar como mínimo a 30 mil maestros en el 2008, pero, este programa no se cumplió gracias al cuestionamiento del magisterio a través de la demanda de inconstitucionalidad que presentó el SUTEP ante el Tribunal, a ello se suma la negativa del MEF de considerar presupuesto alguno para dicha implementación, que hasta hoy no lo hay; pero, aún así, nuevamente vuelven a la carga con el D.S. 079­2009-ED con el que, de manera desesperada, convocan a la incorporación de 20 mil maestros ofre-ciéndoles supuestas bondades de ascenso de nivel y una "jugosa" remuneración que se ofrecen a través de una millonaria campaña por los medios de información.

¿Están obligados los maestros a participar de este examen?

No. Porque de acuerdo al D.S. 079-2009-ED sólo participarían los que voluntariamente se inscriban para la prueba; para ello, llaman a una inscripción camuflada, a través de Internet, seguramente para volver a inflar el número de supuestos participantes. Los burócratas del MED piensan que los maestros somos ingenuos y que tal vez, ilusionados por las espectaculares cifras que difunden a diario por sus medios de comu-nicación, nos atreveríamos a aceptar una ley que atenta contra la profesión docente, el derecho a hacer carrera pública auténtica con estabilidad laboral. Creemos en la firmeza del magisterio y estamos seguros que no se dejarán sorprender con la campaña muy bien montada desde el gobierno y los funcionarios del ministerio de Educación.

¿Qué significa incorporarse a la ley de CPM 29062?

Significa en primer lugar, renunciar de manera voluntaria a todos los derechos ganados en la ley del profesorado, en segundo lugar significa aceptar las condiciones de la CPM que impone esta nueva ley incluyendo el sistema mañoso de evaluación del desempeño que al desaprobar tres veces consecutivas o al no presentarse a las mismas, serás retirado de la carrera, sin pensión ni opción de reingreso.

¿Cuál es el afán de implementar la evaluación en estos tiempos?

Frente al fracaso de las políticas educativas de Alan García y su ministro Chang, hoy más que nunca necesitan echar mano de algo que les ha funcionado para golpear y desprestigiar al magisterio, como son las evaluaciones; pero, además para tratar de levantar en las encuestas a García, difundiendo las supuestas enormes bondades de su Ley de CPM.

¿Es cierto que los maestros al incorporarse a la CPM 29062 ganarán las cifras difundidas?

Debemos indicar que estas cifras fueron difundidas sin ninguna base legal y se publicaron sólo para sorprender a los maestros y animados a participar en el examen. Frente al cuestionamiento del SUTEP ahora tratan de camuflar con el D.S. 079-EF en el que se fijan algunas cifras y hasta se simulan modificaciones al reglamento de la ley, cambiando supuestamente la jornada laboral de horas cronológicas a pedagógicas, incorporando horas de trabajo extras para que el maestro pueda ganar las "abultadas" cifras que ahí se señalan. Lo cierto es que el mencionado Decreto Supremo en su inciso 93.3 modifica antojadizamente el reglamento señalando que la jornada de trabajo será en función de horas pedagógicas de 24, 25 y 30 respectivamente, pero en el inciso 93.2 mantiene la jornada laboral ordinaria de 30 horas cronológicas; eso quiere decir, que los profesores que se incorporen a esa ley percibirán una remuneración proporcional en función de sus horas de trabajo, es decir el número de horas trabajadas en la semana (24, 25, 30 horas pedagógicas) divididos entre las 30 horas cronológicas de la jornada ordinaria (inciso 93.5). Lo que significa que las tan publicitadas cifras, no se cumplirán en la práctica y la mayoría de maestros continuaremos con un sueldo de hambre sin posibilidades de incremento, porque ello dependerá del ascenso que ya no es posible en esa ley y las evaluaciones de desempeño estandarizadas y tramposas que se tomarán en el lapso de tres años.

¿En qué se basa el SUTEP para señalar que ocurrirá esto?

Un ejemplo claro de lo que pasaría con los profesores que voluntariamente se incorporen a esta ley, es lo que viene ocurriendo con los profesores contratados que según la RM. 161-2009, la jornada laboral de todos ellos es de 24, 25, 30 y 40 horas pedagógicas respectivamente según trabajen en inicial, primaria o secundaria y cumplan funciones de director o profesor de aula, que hoy ha sido ratificado con el D.S. 079­-2009-EF que al mismo tiempo fija una remuneración en el primer nivel para todos los contratados en 1196,00 nuevos soles, pero que el mismo será en función de las horas de trabajo (24, 25, 30 hrs. pedagógicas) y siendo la jornada ordinaria que señala la ley de 30 horas cronológicas ó 40 horas pedagógicas; están percibiendo hoy, la mísera remuneración de 875,00 nuevos soles. Al respecto, el SUTEP viene preparando una denuncia penal en contra del MED por estafa a los profesores contratados de todo el país.

¿Es cierto que el magisterio se opone a todo tipo de evaluación?

Esto tampoco es cierto, porque en la Ley del Profesorado 24029, está claramente definido el sistema de evaluación para el magisterio de carácter permanente, sistematico e integral, que incluye el desempeño laboral, los antecedentes profesionales y los méritos: que conduce a la promoción y el ascenso de nivel. Los maestros nos oponemos a la evaluación estandarizada impuesta por el neoliberalismo que no tiene en cuenta el contexto del aula, desligada del proceso enseñanza aprendizaje, es excluyente y punitiva. Estamos de acuerdo ton una evaluación pedagógica que tome en cuenta todos los factores del contexto y valore todos los elementos de la formación del profesional en la educación, tanto los elementos cognoscitivos como los valo-rativos, integrándolos en una totalidad de formación que se busca plasmar.

¿Qué pasará si los maestros no participamos en la evaluación para la incorporación?

Al ser de carácter voluntario, ningún maestro está obligado a inscribirse ni mucho menos participar en ella, por 10 tanto, tampoco existe sanción alguna. Todos los profesores nombrados antes del 2008, estamos comprendidos en la Ley del Profesorado y mientras no nos incorporemos a la otra ley, permanecemos en nuestra Ley 24029, con los derechos que contempla la misma y con las posibilidades de continuar luchando por su vigencia y exigiendo la derogatoria de la nefasta Ley 29062 a la cual quieren incorporamos con falsas ilusiones. La misma ley inventada por los neoliberales nos protege frente a cualquier imposición, porque en su 12ª segunda disposición complementaria señala lo siguiente:
"En tanto no ingresen a la CPM dispuesta por la Ley 29062, los profesores en servicio continuarán comprendidos en los alcances de la Ley 24029 y su modificatoria 25212". Esto mismo trae por tierra el aprovechamiento descarado de algunos desorientados que llaman a presentar acciones de amparo cobrando elevadas sumas a los profesores con el cuento de protegerlos del examen.

¿Eso significa que la Ley del Profesorado está vigente?

Por su puesto que sí, porque al promulgarse la Ley 29062, no deroga la Ley 24029, su modificatoria 25212, ni su Reglamento D.S. O19-90-ED. Es por eso que el Reglamento de la misma Ley 29062, vuelve a reiterar lo siguiente:
El presente reglamento es de aplicación únicamente para aquellos profesores que han ingresado a laborar al amparo de las normas que rigen la carrera pública magisterial o aquellos que han sido incorporados a ésta en el marco del programa establecido por el Ministerio de Educación, subsistiendo el régimen establecido por la Ley N° 24029 y su reglamento, para aquellos profesores que laboran a la fecha bajo dichas normas.

¿Qué hacer en este momento?

1.- No inscribirse para el examen de incorporación.
2.- Mantenerse firmes en la defensa de la Ley del Profesorado, exigiendo la derogatoria de la Ley 29062.
3.- Realizar un trabajo de información al resto del magisterio y a la opinión pública desmintiendo la campaña del gobierno de las supuestas bondades económicas de la remuneración.
4.- Levantar la propuesta de una auténtica CPM, democrática, con derechos y debidamente financiada.
5.- No descartar ninguna forma de lucha. Fortalecer las bases del SUTEP forjando la más amplia unidad del magisterio nacional.

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